Película analizada: El club de la lucha. David Fincher (1999)
La sociedad actual se basa sobre todo en un sentimiento de frustración, pesimismo y negatividad existencial donde la persona nunca se encuentra a gusto con su vida. Este es el inicio del protagonista del Club de la lucha (Edward Norton) quien se focaliza en la sociedad consumista como razón de ese mal estar. Hasta ahí podemos afirmar que esa necesidad es común a muchas personas, la de salir de esa existencia vacía en donde no se reconocen. Pero la forma de salir de ese vacío, una forma de terapia, es planteada como un camino hacia la autoestrucción y la destrucción del otro. Es una terapia basada en el nihilismo, en una antirrealidad, frente a una vida basada en valores constructivos y reales como son: La verdad, la honestidad, el conocimiento, la libertad, la valentía, la paciencia o la justicia.
El vacío existencial del protagonista, cuyo nombre nunca se menciona en la cinta (una signo más de “ser nada”) le encamina a sentir sensaciones a partir de la aproximación hacia la muerte. Solo es algo cuando la muerte está cerca.
Primero se acerca a la muerte con los grupos de cáncer, como si estar en el peligro de la muerte reanimara la vida en una idea de quien está a punto de perder todo puede ganar algo. Estas son las ideas que se plantean en el suicidio. buy and sell domains . En este caso la pérdida de todo no solo viene desde lo material sino desde lo que es la persona. No creer en nada al protagonista le hace sentirse mejor, afirmando “cuando se pierde todo somos libres de actuar”, así la muerte nos lleva a la libertad y la locura se presenta como una forma de liberación, como forma de no estar atado a nada, por lo que se deja de tener miedo, por perder hasta la vida.
Esa locura se presenta en forma de “amigo imaginario” Tyler Durden (Brad Pitt) que es el alter ego de nuestro protagonista quien le guiará en ese camino de la autodestrucción al crear “el club de la lucha”, un espacio y lugar donde dañarse a sí mismo y dañar a los demás para poder dar sentido a su vida, hacia la muerte.
Es decir, la libertad y la valentía, dos valores reales que hacen a la persona poder existir de forma plena, en la cinta se plantean desde una posición antirreal, desde una inversión en donde la libertad es un “todo vale” y la valentía (no tener miedo ) parte de un “déjate destruir”
Cuando en la persona todo tiene una visión negativa por la falta de valores reales, la falta de sentido en la vida hace que «los Gurus» del nihilismo aprovechen a ofrecer la autodestrucción como forma de liberación del miedo, de la angustia y del terror a vivir. Así, el club de la lucha plantea un nihilismo bañado de espiritualidad, una vida basada en el gobierno de la nada, de la muerte, de la destrucción pintada con una capa de filosofía para vivir. Y todo se presenta como una opción para combatir el materialismo reinante en nuestra sociedad. Es decir, la única forma es la muerte y destrucción. En este caso vuelve a ganar el materialismo por lo que se deduce que esta autodestrucción y destrucción del otro no parece que sea la forma más adecuada de salir del materialismo.